"En ninguna parte alguien concedería que la ciencia y la poesía puedan estar unidas. Se olvidaron que la ciencia surgió de la poesía, y no tuvieron en cuenta que una oscilación del péndulo podría reunirlas beneficiosamente a las dos, a un nivel superior y para ventaja mutua"-Wolfgang Goethe-

viernes, 28 de septiembre de 2012

Vuelvo al hilo con un vinillo

No quiero convertir el blog en un lugar de queja hacia la política científica del país, ni en un lugar de discusión sobre lo que no me gusta del ámbito científico y la medida de la supuesta calidad. Si bien he hablado de eso y lo volveré a hacer cuando tercie, quiero volver a la divulgación de mi trabajo. Si es que a alguien le interesa...

De vinos creo que hablamos cuando expliqué la diferenciación de denominaciones de origen de vinos blancos mediante redes neuronales (1). Ese trabajo fue bonito y entretenido y la parte experimental la realice en Granada, junto a miembros de  uno de los grupos del Departamento de Química Analítica. Allí se me planteó el empleo de elementos metálicos para la diferenciación de las mismas denominaciones. Recordé los trabajos de Kowalski (2, 3, 4, 5), uno de los pioneros en la aplicación del reconocimiento de patrones a la diferenciación en base a la composición química de vinos, precisamente. El tema me interesaba, estudio de la composición metálica y el reconocimiento de patrones. Por cuestiones ajenas a mi voluntad, no puede empezar el estudio hasta finales de 2010 y, si bien ya resuelto lo envié a publicar en marzo de 2011, no ha sido aceptado hasta hace poco en la revista Food Chemistry y saldrá publicado en papel en diciembre. La versión on-line está disponible desde junio.

Se diferencian vinos blancos españoles de las D.O. Condado de Huelva, Rueda, Ribeiro y Penedés en base a su contenido en alumino, bario, boro, calcio, cobre, cromo, hierro, magnesio, manganeso, níquel, fósforo, potasio, silice, sodio, estroncio azufre y zinc. La determinación se lleva a cabo mediante espectroscopía de emisión atómica de plasma inducido acoplado, previa mineralización ácida de la muestra.


Plasma de un espectrómetro de emisión atómica de  ICP

Para todos los elementos, salvo para el cobre, se observan diferencias significativas entre al menos un par de  D. O. mediante el test no paramétrico de Kruskal-Wallis. Una vez se lleva a cabo un análisis de componentes principales se observan ciertos agrupamientos entre muestras.


PCA biplot

Se obtiene un modelo mediante LDA que separa perfectamente las cuatro denominaciones usando el contenido en cromo, manganeso, silicio, sodio y estroncio. Estas variables se extraen realizando un análisis por pasos eliminando en cada paso la variable menos discriminante hasta maximizar el cociente entre la varianza entre grupos y dentro de los grupos. Posiblemente un día deba de hablar de esta técnica.

Distribución de muestras en el plano de dos funciones discriminantes

Finalmente se aplica una técnica de reconocimiento de patrones denominada de Máquina de Vectores Soporte (SVM). Imaginemos dos grupos de muestras en un plano, se obtiene las fronteras entre ellos empleando las muestras más próximas a la clase contraria, es decir aquellas que se encuentran en los bordes de la clase por la zona más próxima a la otra clase. Con unas pocas muestras (denominadas vectores soporte) se construye pues una frontera lineal que separa ambas clases. La ventaja es que se pueden usar menos muestras que en el caso del LDA, pues las SVM aprenden de las muestras que se encuentran en los márgenes y no en todo el conjunto. Esta técnica también merece ser explicada a parte, pero puede resultarme algo difícil hacerlo de forma cualitativa. Recomiendo la lectura del tutorial de Brereton y LLoyd en The Analyst, una autentica maravilla.

En nuestro caso, la clasificación mediante SVM resulta igual de eficiente que el LDA.

Por tanto, el contenido metálico de los vinos, fuertemente relacionado con el tipo de suelo de cada área geográfica, la pluviosidad, prácticas de agricultura y retención del tipo de uva, nos permite diferenciar el origen del mismo. Este trabajo puede complementar al estudio de volátiles como herramienta de caracterización y clasificación de vinos españoles.




Requiescat in pace

Cuando estudiaba Filosofía en COU leímos uno de los textos de Nietzsche donde, si mal no recuerdo se decía "Dios ha muerto, viva el superhombre". Creo recordar, aunque puedo equivocarme, que simbolizaba la ruptura con toda moral proveniente de la religión, pues ésta debilita al hombre. Nosotros jugábamos a decir frases por el estilo, puesto que estábamos en un colegio de curas. Desde el "Dios ha muerto, viva el  Rock" de  unos, pasando a las alusiones al Sevilla y al Betis, y cerrando con un "Dios ha muerto, viva la Ciencia". Esta última no recuerdo si fue nuestra, del profesor de Filosofía o de algún otro autor que leyéramos.

Hace un mes leí la carta de la señora Secretaria de Estado de Investigación, Carmen Vela, en la revista Nature. Mi primera reacción fu quedarme estupefacto con lo que leía, mero rechazo por alusiones, porque disminuir el presupuesto en Ciencia termina repercutiendo en todos los españoles, no solo en  los científicos. Además, puesto que de mayor quiero ser científico, me duelen los recortes como al que más. Pero ese no es el único problema.

Resulta que en España sobran científicos, según ella, y hay que adelgazar en número, no en calidad. Claro que sobran, porque cuando están formados no los podemos mantener y los chavales han de irse fuera para ser alguien. ¿En vez de recortar en contratos postdoctorales, por qué no hacerlo en predoctorales, aunque implique dejar de tener mano de obra barata? Aunque lo suyo no es recortar en formación, pero como eso en este país cada vez importa menos... No creo que sobren becarios pre o postdoctorales, faltan oportunidades de permanencia en la carrera científica, porque España es un país tradicionalmente atrasado en  ciencia. Además, lo poco o mucho avanzado en las dos últimas décadas puede irse al garete muy pronto.

Los recursos económicos se repartirán a los investigadores excelentes, Vela dixi. ¿Quién y en base a qué se hará la selección? Puede que un chavalito trabajando en la adsorción de compuestos sobre partículas de oro no tenga una investigación puntera, pero si esta adsorción se hace sobre una nanopartícula de oro y se usa para crear una molécula capaz de alojar un medicamento en su interior y, según su superficie, fijarse en el punto exacto del organismo sería excelente. La ciencia básica es muy importante, porque sin conocer lo básico no se llega a la excelencia. Y lo básico no es barato.

La peor impresión me la llevo cuando leo que anima a los investigadores a competir por proyectos europeos. Como si no supiesen los investigadores que es ahí donde está el dinero. Esta frase es como decir que una vez tirada la toalla por parte del gobierno de España, solo nos queda el recurso de que Europa rescate a nuestra Ciencia. Cosa que por otra parte lleva haciendo durante años, dando trabajo a nuestros científicos.

¡Convertir la crisis presupuestaria en oportunidad! ¿Acaso piensa que somos idiotas? Menos recursos no puede ser sinónimo de mayor calidad. Si antes investigaban X buenos investigadores e Y mediocres, podíamos tener X ' buenos resultados y una fracción de Y', también buenos. Ahora reduces incluso en X, luego reduces los buenos resultados. El recorte y la excelencia no van de la mano. Y las palabras de esta señora me resultan de gran cinismo y poca oportunidad. Pero esa es mi opinión.


Ahora toca decir, "la Ciencia ha muerto, viva Dios", porque leyendo esto parece que en España debemos creer en los milagros, en la multiplicación de los panes y los peces. 

PD: Por cierto, enhorabuena a la señora Vela por su publicación en Nature, sin duda habrá aumentando la posición de la universidad en la que estudió en el Ranking de Shangai.